El atún de aleta amarilla se encuentra entre las especies de atún más grandes, alcanzando pesos de más de 180 kg (400 lb), pero es significativamente más pequeño que los atunes de aleta azul del Atlántico y el Pacífico, que pueden llegar a más de 450 kg (990 lb), y ligeramente más pequeño que el patudo y el atún de aleta azul del sur. La segunda aleta dorsal y la aleta anal, así como los filetes entre esas aletas y la cola, son de color amarillo brillante, lo que da a este pez su nombre común. Las segundas aletas dorsales y anales pueden ser muy largas en los especímenes maduros, llegando casi hasta la cola y dando la apariencia de hoces o cimitarras. Las aletas pectorales también son más largas que las del atún rojo, pero no tanto como las del atún blanco. El cuerpo principal es de un azul metálico muy oscuro, cambiando a plateado en el vientre, que tiene unas 20 líneas verticales.

Los lomos de atún están listos para ser cortados en filetes o en porciones de sushi/sashimi. Están disponibles en el grado de sushi o en el grado de parrilla más asequible. Cualquiera de los dos puede ser cocinado, pero los lomos de sushi han sido seleccionados por su textura, apariencia y sabor cuando se sirven crudos o sellados. Estos lomos se preparan sin piel, sin hueso y sin línea de sangre.

El Atún de Aleta Amarilla fresco capturado en estado salvaje es perfecto para una ensalada, servido a la parrilla o a la brasa. Es un pescado popular que se sirve crudo como sashimi o sushi, y se vuelve firme y húmedo cuando se cocina. El atún de aleta amarilla se combina mejor con un vino blanco moderadamente lleno que resalta su calidad aromática.